La redacción médica, ¿en qué consiste la labor de redactor médico?
La gente común generalmente busca consejos de salud en Internet. Su amplia disponibilidad ha creado una situación sin precedentes en la que todos tenemos la capacidad de acceder a información médica y expandir nuestros conocimientos. Sin embargo, esta situación es muy delicada debido a la diversidad en la calidad de los materiales de acceso público. Como profesionales que creamos contenido médico, sabemos de lo que hablamos. La redacción médica es una tarea de gran responsabilidad.
¿En qué consiste el trabajo de redactor médico?
Por lo general, los copywriters son tienen la habilidad de presentar cada tema de forma clara y atractiva para el lector promedio. No obstante, existen temas que resultan especialmente desafiantes de comprender, y la investigación convencional genera más interrogantes que respuestas.
Un ejemplo perfecto de esto son los temas médicos, los cuales frecuentemente demandan que el redactor posea conocimientos básicos en ciencias y la habilidad de navegar con facilidad entre los últimos avances e investigaciones científicas.
Es muy probable que este redactor sepa la diferencia entre taquipnea e hiperpnea, y pueda enumerar al menos 10 causas de hipercalcemia. Sin embargo, su habilidad principal radica en describir estos términos de una manera fácil de entender para el lector objetivo. Al fin y al cabo, parece que un buen redactor debe destacar por su habilidad para escribir de forma clara y comprensible para todos.
El redactor de contenido médico debe ser altamente flexible, ya que no solo se encarga de crear textos científicos accesibles para el público en general, sino también de elaborar materiales técnicos dirigidos a especialistas.
¿Puede la redacción médica ser una relevante profesión a futuro?
La profesión está evolucionando y alejándose de las promociones basadas en textos inflexibles para algoritmos de búsqueda. En cambio, se enfoca en el marketing de contenidos y la construcción de relaciones duraderas con los clientes. Por lo tanto, no es sorprendente que la demanda de redactores que creen contenido valioso y especializado, incluyendo textos sobre temas médicos, esté en aumento.
El marketing en la industria médica está en constante desarrollo, aunque todavía hay una escasez de buenos redactores médicos en el mercado. Por ello, se cree que esta profesión aún le queda mucho por lograr.
Los redactores especializados en el campo médico deben poseer un amplio conocimiento de la terminología médica y transmitir de forma clara y precisa cualquier información compleja relacionada con tratamientos, enfermedades y productos médicos. Además, deben tener la habilidad de adaptar su estilo de escritura para llegar tanto a profesionales de la salud como al público en general.
La capacidad de transmitir información médica de forma clara y convincente es esencial para el éxito de cualquier campaña de marketing en el ámbito de la salud. A continuación, analizaremos quiénes requieren la ayuda de estos especialistas:
- Empresas farmacéuticas
- Portales de internet sobre temas médicos
- Universidades y escuelas de medicina
- Clínicas y consultorios médicos
- Tiendas de suministros médicos
¿Cómo se practica la redacción médica?
La redacción médica a menudo se considera como una especialización dentro del campo de la redacción que aborda temas específicos y limitados. Sin embargo, desde la perspectiva de los redactores, esto se percibe de manera distinta.
Un redactor médico debe tener un dominio del idioma y los conceptos básicos de SEO, así como debe desarrollar una metodología adecuada de escritura y mantener una ética profesional desde el principio.
¿Debe un redactor médico tener un diploma médico?
La respuesta a esta pregunta es sencilla: no está obligado, pero es recomendable que cuente con formación en el área. Actualmente, no existe una regulación específica para esta profesión; cualquier individuo puede redactar textos médicos, aunque no todos deberían hacerlo.
La carencia de conocimientos básicos en ciencias fundamentales y la falta de habilidades para evaluar de manera crítica las fuentes utilizadas, a menudo conlleva a una baja calidad en los textos ofrecidos. En consecuencia, los clientes son los que pagan por los errores de contenido de los redactores, ya que su imagen como profesionales confiables se ve gravemente perjudicada.
Por ello, contar con una formación médica es una gran ventaja para un redactor especializado en medicina. Esto se refleja principalmente en la comodidad y eficiencia en el trabajo, ya que el conocimiento adquirido durante los estudios permite comprender rápidamente los temas en profundidad. Además, no se puede ignorar el valor de conocer el lenguaje especializado en el campo, lo cual facilita la búsqueda e interpretación de investigaciones y directrices.
¿Cuáles son las fuentes en las que el redactor puede confiar para redactar textos de calidad?
Desde la etapa inicial de la investigación, es crucial prestar atención a los aspectos técnicos. De hecho, la selección de fuentes determinará si el resultado final será una simple reproducción de artículos de divulgación científica o un estudio valioso del tema. Por lo tanto, ¿de dónde es recomendable obtener conocimientos para garantizar que la información en los textos sea totalmente creíble?
Un copywriter médico principiante debe familiarizarse con:
- Bases de datos, como PubMed o Google Scholar,
- Las últimas directrices de las sociedades científicas nacionales e internacionales,
- Manuales médicos regularmente actualizados.
Ética y responsabilidad del redactor médico
El redactor médico es la representación del conocido «Doctor Google».
Cuando se crean textos, es crucial tener en cuenta que a menudo son la principal (y a veces la única) fuente de información para muchas personas.
La responsabilidad es enorme, ya que los consejos negligentes pueden afectar negativamente la salud de muchas personas, incluyendo aquellas que podrían estar enfermas.
Según la ética profesional no oficial del redactor médico, se debe evitar la creación de textos para:
- difundir teorías sin fundamentos médicos,
- promover comportamientos arriesgados y perjudiciales para la salud,
- desanimar la búsqueda de una opinión médica,
- basarse en pautas desactualizadas,
- basarse en investigaciones científicas increíbles o extraordinarias.
Por lo tanto, un redactor médico tiene la responsabilidad no solo de crear la imagen de experto del cliente, sino también garantizar que la información proporcionada sea válida y útil para el público. Es por esta razón que esta profesión se considera una de las más delicadas en el campo del marketing especializado.
Resumen
- El redactor médico no solo se encarga de escribir textos de divulgación científica, sino que también desarrolla materiales especializados para la industria dirigidos a profesionales de la salud.
- La formación médica es de gran ayuda para un redactor al crear contenido, pero no es indispensable.
- Obtener conocimientos médicos de bases de datos especializadas, las últimas directrices de sociedades científicas y manuales actualizados regularmente es de gran valor.
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